Éxodos y Romerías.
Esta exposición forma parte del Festival de la New European Bauhaus del 9 al 12 de junio.
https://europa.eu/new-european-bauhaus/get-involved/festival_en
Aquellos días de 1985, parecían días cotidianos que transcurrían como cascadas de tiempo en mi vida de joven artista, para quien la decisión de zambullirse en las turbulencias del Arte, tomada veinte años atrás, era ya irrenunciable.
Sin embargo, iban a ser también mis últimos días sin discapacidad, en los que se fraguaba esta nueva y determinante situación de la que no era aún consciente.
Estaba interesado en la multitud como el tema central de mis cuadros. Quizá, expresión de aquellas tensiones humanas vividas durante la Transición, que a la vez eran el paisaje en el que me veía inmerso con mis incertidumbres y sobre todo con el temor indefinido de una debilidad.
Pronto la debilidad pasaría a ser mi fortaleza, y el temor, mi resistencia, lo digo con la humildad de quien sigue resistiendo por amor al Arte.
Las multitudes (desconocía entonces que fuera un tema pionero en los dibujos de Goya) me permitían irrumpir en el cuadro con un talante abstracto, casi de action painting, y descubrirme acto seguido autorretratado en medio de la urdimbre de pinceladas que configuraba tal multitud.
Ser a la vez social e individual. Estar y ser que digo ahora, cuando comienzo a comprender.
Desde entonces han sido varios los motivos en esta acción de pintar gente. La primera gran composición, Avance automático en homenaje a un alcalde Tierno (acrílico sobre correaje detransmisión, 15 x 10000 cm), expuesto en el pasillo intercomunicador del metro Nuñez de Balboa de Madrid en el invierno de 1986, obra que fue parcialmente destruida durante la exposición, sigue los postulados de Harold Rosenberg, donde prima el proceso sobre el producto.
La Romería del Cristo del Arte, La Gran decontrucción de la Romería del Cristo del Arte o Con el arte pa otra parte, La Purga del sanbenito rebautizado en 2020 Pandemia, y Lluvia Ácida, son piezas donde han intervenido lo dramático y lo irónico, unas veces por separado y otras simultáneamente, y mantienen el nexo de un espíritu crítico. En ellas está mi admiración por el maestro aragonés al que considero el más grande pintor de la Historia del Arte.
Son estudios de juventud, búsquedas del camino, grandes batacazos, y el laboratorio donde experimenté una de mis preocupaciones más arraigadas: el movimiento de la fijeza.
Han pasado treinta y siete años y la obra que da respuesta a esta inquietud por el movimiento de la fijeza es El Éxodo de la Ternura.
Se trata de volver a la pieza herida, deconstruir el accidente y darle de nuevo la palabra a un pasado que, gracias a la tecnología vuelve a ser posible. Por ello, más que ninguna otra, es un Slow, una obra lenta que ha precisado todo ese tiempo para realizarse, donde ya no
tengo claro si el producto es el proceso o viceversa, y en la que la impersonalizada multitud se define figura a figura, en un retrato de cada individuo que la compone.
Si al comenzar en 1985 pinté el film que no podía filmar, y lo puse en movimiento proponiendo mirar la pieza desde un hipotético tren en marcha, ahora he filmado el cuadro que a duras penas puedo pintar y lo muevo, utilizando herramientas informáticas, así pues lo he convertido en un videoarte.
Fue una action painting, un performance, un cuadro de inusuales proporciones, el boceto de un mural en el interior del metro, una utopía y hoy, con la magnífica banda sonora que ha compuesto Suso Saiz, la animación infográfica y la impresión digital de la pieza sobre papel fotográfico, es una obra acabada.
¿Acabada?, quién lo sabe, ojalá tenga vida propia, aunque lamentablemente su vida es el éxodo de la ternura que amenaza nuestro humano destino.
Ángel Baltasar (19-01-2020 / 17-4-2022)
https://www.flipsnack.com/6A8997E569B/copy-of-a-fuego-lento/full-view.html
23/05/2022 - 04/09/2022
Calle Sebastián Herrera 15, 1ª planta 28012 Madrid
Sala Cambio de Sentido